Sillas de coche para bebes y niños. i-Size, elige la silla más segura

Hasta la fecha, para que una silla de coche para bebé se pudiese usar en la Unión Europea y por supuesto en España, debía superar los tests que incluye la homologación ECE R44/04. La última normativa i-Size surge con el fin de facilitar la elección de las sillitas infantiles, haciéndolas más «universales» y consiguiendo que sean más sencillas de utilizar. La letra «i» de esta normativa proviene de ISOFIX y las principales diferencias con respecto a la norma actual son las siguientes:

  • Se facilita la elección de las sillas, haciendo su elección similar al sistema de tallas de ropa para niños. De este modo, desaparece la clasificación actual basada en grupos 0 0+ 1 2 3 y los asientos dispondrán de una talla para la estatura y el peso máximo del niño que ha de utilizarla.
  • Los tests de choque se realizan con un tipo de maniquíes o «dummies» que poseen una tecnología y criterios para evaluar daños mucho más avanzados que los actuales.
  • Se realiza una prueba de impacto lateral, para mejorar la respuesta en esta clase de choques.
  • La orientación de los asientos hacia atrás es mucho más segura para los niños, por este motivo se incentiva el uso de sillas infantiles con esta orientación, garantizando que se puedan utilizar hasta una edad de quince meses como mínimo.
  • Se establecen unas medidas máximas de la silla de coche y otrás mínimas de los asientos de los automóviles, de manera que todas las sillas puedan ser usadas en cualquier plaza homologada vi-SIZE, eliminando los problemas de compatibilidad actuales.

Etiquetas Homologadas

La etiqueta para las homologaciones ECE R129 o i-size (tamaño-i) será la siguiente:

etiqueta i-size

Los asientos infantiles y las plazas de los automóviles que cumplan con la norma que indica que se puede instalar sobre ellos cualquier silla de niño o bebé, llevará el siguiente logotipo:

asiento-para-silla-bebe
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Campaña «Dale la vuelta»

Si sufrimos un accidente a una velocidad de 50 km/h, una persona adulta es probable que pueda sufrir el conocido latigazo cervical, en cambio si se trata de un menor de cuatro años, estará expuesto a lesiones medulares severas, irreversibles o fatales. Casi la totalidad de estas lesiones, un 95%, se podría evitar si colocamos al niño o niña a contramarcha, como mínimo hasta los 4 años de edad. No podemos evitar los accidentes, pero sí tenemos la oportunidad de minimizar sus consecuencias. Asegúrate que proteges lo que más amas, infórmate. Un simple gesto puede cambiar nuestras vidas.

¿Por qué son mejores las sillas para coche i-Size?

Como hemos comentado anteriormente, la nueva norma ECE R129 incluye un test de impacto lateral, para verificar la seguridad de la silla en este tipo de choque. Esta norma garantiza que este tipo de asientos pueden ser instalados en cualquier plaza de un coche que cumpla con la especificación i-Size, solucionando el problema de compatibilidades que teníamos hasta ahora.

Resumiendo, la ventajas de las sillas tamaño-i son las siguientes:

  • Mejora la seguridad y protección en impactos frontales en cuello y cabeza, al utilizar sillas colocadas en sentido inverso a la marcha. Esta posición es hasta 5 veces más segura que en sentido frontal.
  • Ofrece más protección en choques laterales.
  • Evita los errores a la hora de su colocación.

Esta norma no sustituye a la anterior ECE R44/04, los modelos fabricados bajo esta norma pueden seguir utilizándose, pero la tendencia es que vayan siendo sustituidos progresivamente por los nuevos i-size.

La etiqueta de homologación es la siguiente:

Para que una silla infantil pueda venderse bajo esta homologación, el fabricante debe haberla sometido con éxito a diferentes pruebas de seguridad. La normativa europea exige que se realicen los siguientes tests:

  • Test de impacto frontal a una velocidad de 50 km/hora, para medir los esfuerzos soportados por el cuerpo del niño y su desplazamiento, poniendo especial interés en cabeza, cuello y pecho.
  • Test de impacto trasero (alcance) a 30 km/hora de velocidad
  • Tests variados sobre el cierre y la hebilla del arnés de la silla de bebe o niño, para verificar que se puede abrir fácilmente tras un accidente, pero que a su vez no sea fácilmente manipulable por el niño.
  • Análisis del diseño del asiento, con especial atención a bordes cortantes o piezas rígidas sin proteger.
  • Pruebas del arnés o cinturón, para comprobar que se ajusta a la perfección a ocupantes de diversas estaturas y pesos.
  • Otras pruebas, como resistencia al fuego, composición de los materiales, resistencia a la corrosión, toxicidad, etc.

Normativa y legislación sobre sillas de coche para bebé y niños en España

El Real Decreto 667/2015 establece la manera en que los niños deben viajar en los automóviles.

En los vehículos hasta 9 plazas los pasajero de estatura igual o inferior a 135 centímetros debe viajar en las plazas traseras, utilizando medios de retención homologados, en función de su peso y estatura. Su utilización debe realizarse siguiendo las especificaciones especificaciones que el fabricante realice en el manual de uso, o cualquier otro documento análogo.

Existen tres excepciones por las cuales un menor puede circular en el asiento delantero:

  • Que se trate de un vehículo sin asientos traseros.
  • Que los asientos traseros estén ya ocupados por menores
  • Que en dichos asientos no se puedan instalar los sistema de retención.

En caso de que se ocupen los asientos delanteros, sólo se podrán orientar hacia atrás si el airbag delantero ha sido desactivado.

No instalar o utilizar dichos sistemas de retención infantil se considerará infracción grave o muy grave.

Desde la DGT se recomienda utilizar sistemas de retención hasta que el menor alcance 1,5 m de estatura. Con una altura mayor, deberá utilizar el cinturón de seguridad del coche.