Arrancar el coche en verano, ¿por qué cuesta más?

¿Notas que, durante estos meses, al introducir la llave a tu coche le cuesta más de lo habitual arrancar? ¡Es normal! En este artículo te contamos los motivos.

Posibles averías de la batería

Al igual que sucede con las bajas temperaturas durante la época invernal, en verano, con el calor desmesurado, la batería del coche se resiente.
Y es que su ácido interno se reseca con mayor frecuencia lo que hace que el tránsito de la electricidad se vea notablemente afectado, percibiéndose, sobre todo, en la demora al arrancar el vehículo. Si a este hecho se suma que la batería de tu coche se encuentra al final de su vida útil (normalmente, oscila entre los 4 y 5 años) lo más posible es que acabe en una avería teniendo que visitar, de forma urgente, tu taller de confianza.

En este sentido, según los últimos datos, de todas las asistencias llevadas a cabo en carretera durante el verano del año pasado, un 23 por ciento estaban relacionadas con problemas en la batería.

Consejos para cuidar la batería en verano
Además de estar muy atento a posibles señales de avería, conviene tener en cuenta los siguientes consejos:

  • Desplazar el coche con cierta frecuencia, realizando trayectos de una duración mínima de 20 minutos con tal que el alternador recargue la batería.
  • Examinar la batería con tal de cerciorarte que no hay señales de deterioro de la misma como, por ejemplo, óxido en los bornes.
  • Estacionar en la sombra o en áreas cerradas para evitar las extremas temperaturas.
  • Estar alerta ante posibles señales de averías eléctricas como la lentitud en el funcionamiento tanto de las elevalunas como de los limpiaparabrisas.