Cómo influye la música en la conducción

Para mucha gente, uno de los lugares más usuales para escuchar música es el coche. Y es que la conducción y la música van unidas en casi en la totalidad de los trayectos que realizamos, ya sea de camino al trabajo, al llevar a los niños al colegio, en cualquier atasco, en los viajes, etc.
No obstante, hay que tener en cuenta que escuchar tus canciones favoritas al volante, además de afectar a tu estado de ánimo, también lo hace a tus habilidades sensoriales lo que tiene su repercusión en la conducción.

¿Qué relación tienen la música y la conducción?

Como hemos comentado, conducir con música, en todo tipo de situaciones, es algo muy normal. De hecho, según recientes estudios, más de un 80% de jóvenes conductores afirman que conducen con música a un volumen elevado. En este sentido, se ha comprobado que la concentración idónea para ponerse al volante se consigue con melodías con decibelios comprendidos entre los 53 y los 95. A la inversa, se ha concluido que conducir con sonidos más elevados y ritmos más rápidos aumenta considerablemente las probabilidades de padecer un accidente debido a la reducción de la capacidad de reacción de los conductores, así como también al aumento de las aceleraciones por parte de los mismos.

¿Qué música es la más apropiada para conducir?

Tal y como se desprende de diferentes estudios, los estilos de música que mejoran nuestra concentración y nos ayudan a estar más activos al volante son los siguientes:

  • Música clásica. Por lo general, propicia a la relajación y a tener una actitud positiva.
  • Pop. Al contar con letras reiterativas y ritmos suaves, la música pop, al igual que la clásica, fomenta a tener un estado de ánimo óptimo.
  • Country. Aunque en nuestro país no es un estilo de música muy escuchado, es una música muy recomendada para viajar.
  • Indie. Este tipo de música, salvo excepciones, se compone de agradables ritmos y suaves melodías que propician la relajación y tranquilidad mientras se conduce.

¿Qué dice la DGT al respecto?

Debido a que la Dirección General de Tráfico (DGT) considera que escuchar música a un volumen demasiado elevado puede privar al conductor de oír lo que sucede a su alrededor, resultando peligroso tanto para ti como para los demás usuarios de la vía, hacerlo por encima de los 87 decibelios puede conllevar una sanción con una cantidad comprendida entre los 100 y los 3.000€

Asimismo, advierte que, con tal de evitar adormecimientos y comportamientos agresivos al volante, es conveniente esquivar ciertos estilos musicales al volante.