Prepara tu coche para tus viajes de invierno

Durante el invierno solemos realizar viajes de forma frecuente debido al período vacacional que tiene lugar en esta época. A la vez, es una de las épocas del año más demandantes para nuestro vehículo. Tenemos que tener en cuenta, que las condiciones climatológicas propias del invierno, como la nieve, la niebla, la lluvia y el frío, son las condiciones que seguramente más afectan tanto a nuestro vehículo en general, en lo que a su mantenimiento y cuidado se refiere, como a nuestra conducción. Es por ello por lo que si vamos a utilizar el coche, tenemos que tener en cuenta que vamos a tener que prepararlo.

Para preparar el coche para nuestros viajes de invierno, tan solo tenemos que seguir unos sencillos pasos que nos garantizarán que no vamos a tener problemas. Es muy importante, que durante el invierno se pueden producir situaciones climatológicas complicadas, por eso a pesar de que pueda parecer algo obvio hay que prestar atención y saber qué es lo que tenemos que llevar en nuestro coche en todo momento.

Haz una revisión antes del inicio del invierno

Una de las mejores formas de preparar nuestro coche para el invierno, es hacer una revisión. Pasarnos por el mecánico para que haga un chequeo general es la mejor forma de tener bien los líquidos para que nuestro coche se encuentre en perfectas condiciones. Si nuestro coche no está perfecto, podemos tener problemas para conseguir arrancarlo o podemos tener problemas al conducirlo por elementos tan clave como por ejemplo los neumáticos.

Si vamos al taller y lo revisamos con anterioridad nos ahorraremos muchos problemas que podrían agravarse por el frío o condiciones extremas en la climatología.

Lleva cadenas de nieve cuando vayas a viajar

En muchas ocasiones nos confiamos porque pensamos que somos capaces de controlar la climatología con la precisión que la haría un experto meteorólogo. Sin embargo, es conveniente que si vamos a salir con el coche en pleno invierno, nos llevemos en todo momento las cadenas de nieve. La nieve puede aparecer en cualquier momento, y con los últimos cambios climatológicos a nivel global, es posible que aparezca cuando menos nos la esperamos, así que es importante llevar siempre las cadenas preparadas para poder ponerlas en caso de que lo necesitemos.

Hoy en día podemos optar entre cadenas clásicas o las nuevas de plástico que se visten sobre las ruedas del vehículo de forma sencilla.

Prepárate para lo peor

Una de las mejores formas de prepararnos para lo peor, es hacer algo tan sencillo como llevar siempre el coche con una cantidad aceptable de combustible, por encima de la mitad del depósito. Y por otro lado cargar también en el maletero de nuestro vehículo una manta, y una botella de agua de dos litros o de al menos medio litro. De esta forma, en caso de que quedemos atrapados en la nieve, vamos a poder pasar una noche sin problemas gracias al agua y a la manta.