Chiptuning, reprogramación de centralitas de coche

Quizás nunca hayas escuchado acerca del chiptuning, sin embargo, conocer su funcionamiento y utilidad puede tener grandes beneficios para tu coche. Entender el chiptuning no es sencillo, por lo que en este artículo te explicaremos detenidamente todo lo que debes saber sobre esta herramienta para que disfrutes de todas sus ventajas.

En la mayoría de vehículos modernos encontramos una unidad de control, esto es, un pequeño ordenador encargado del control y de la supervisión del motor, al que se encuentra conectado por medio de conectores y cables. Desde un taller, o bien tú mismo, se prepara una unidad de control electrónica adicional que se conecta a la unidad de control principal y al motor, pudiendo entonces cambiar el software de este último y optimizar su actividad sin forzar sus componentes. Se trata de una reprogramación realizada sobre el mapeo de los datos de tu coche, los cuales son optimizados en este proceso llamado chiptuning. Esto ocurre porque los fabricantes, a la hora de ensamblar el motor, escogen valores electrónicos menores a los que realmente el rendimiento del motor puede alcanzar.

Reprogramación por vía puerto serial y reprogramación manual

Dependiendo del año de fabricación del automóvil, el modelo y la marca del mismo encontramos las dos siguientes técnicas: reprogramación por vía puerto serial o reprogramación manual. La primera de ellas se lleva a cabo con la ECU (unidad de controles eléctricos), a través de conexión con programador externo al puerto OBD II, ubicado donde se conecta el distribuidor para obtener las lecturas. Por otro lado, en la reprogramación manual se sustituye el chip manualmente. Esta se realiza en coches antiguos con un sistema de gestión de inyección electrónica de combustible; se deberá hacer uso de un sistema de soldadura refinado, desoldadura automático y con cálculo de checksum.

¿Cómo se instala el chip y por qué instalarlo?

Los pasos a seguir para instalar el chip son los siguientes:

  1. Realizar una revisión general para comprobar que no haya fallos, el estado del motor y el sistema de inyección
  2. Medir la potencia del coche a través de un dinamómetro de chasis
  3. Quitar el ordenador, leer el programa original y guardarlo en un archivo
  4. Instalar en un nuevo chip el programa modificado en el ordenador y colocarlo en el vehículo

Cambiando los valores de estos sistemas podrás mejorar la eficiencia de la gasolina, emitir emisiones más limpias, maximizar el rendimiento de tu coche y conseguir mayor velocidad y caballos de fuerza. Al reprogramar el motor se consigue en cada explosión más potencia, por lo que el coche necesitará menos revoluciones por minuto a igual carga y velocidad; esto explica el menor consumo de gasolina.

La relación coste-beneficio del chip es bastante buena, ya que ofrece un gran rendimiento y potencia en relación a su precio; además cualquier vehículo moderno puede acceder a este, por lo que es perfecto para cualquier interesado en mejorar su vehículo.

Entre las ventajas encontramos un ahorro de hasta un 10% del combustible, una aceleración de 0 a 100 km/h más rápida, una recuperación del motor más ágil y la velocidad máxima se ve aumentada; todo esto hace que la conducción sea más satisfactoria. En HP y fuerza de toque, los motores turbocargados aumentan entre un 25 y 50% y los motores atmosféricos entre un 10 y 15%.

Recomendamos que siempre que no controles muy bien este tema, te informes a fin de no poner en riesgo tu coche cambiando valores que no deberías, hecho que podría provocar la pérdida de eficiencia y hasta dañar el vehículo de forma permanente; el tanque de gasolina puede averiarse con la alteración de emisiones y puede tener lugar una detonación al acelerar los tiempos de combustión de aire y combustible.

Asimismo, cabe recordar que, tras cualquier modificación, al considerarse una reforma de vehículo, en un máximo de 15 días, hay que pasar la correspondiente inspección en la ITV.